¿Cómo puede el abastecimiento innovador de energía ayudar al sector de los centros de datos a lograr la inteligencia energética?

Un enfoque proactivo en la búsqueda de nuevos métodos para asegurar la energía en un futuro a largo plazo puede ayudar a la industria a tomar la delantera en cuanto a eficiencia energética de una forma rentable.

Artículo de opinión de François Sterin, director de operaciones (COO) del Data4 Group.

Múltiples aspectos del sector de los centros de datos se están transformando drásticamente. No menos importante es el enfoque del abastecimiento energético, ya que los sectores de la energía y el de los centros de datos están cada vez más intrínsecamente relacionados.

El clamor cada vez mayor para que todas las industrias mejoren la sostenibilidad ha hecho necesario que el sector cambie su forma de pensar en el abastecimiento de energía y se vuelva proactivo en la búsqueda de nuevos métodos, en lugar de pasivo en su consumo energético. Sin embargo, la urgencia del cambio se ha hecho aún más patente en los últimos tres o cuatro años.

Esto se debe, en parte, a la expansión de la IA generativa, que exige más de los centros de datos.

Y para acentuar el reto, el planeta ha sido testigo de una emergencia energética sin precedentes que se ha hecho global. Comenzó durante la pandemia de COVID y ha alcanzado verdaderos niveles de crisis tras la invasión rusa de Ucrania a principios de 2022. Desde entonces, los precios de la electricidad han registrado máximos históricos en algunos mercados, mientras que los del petróleo alcanzaron su nivel más alto en más de 15 años.

Ganando flexibilidad

Estas oscilaciones de precios hacen que todo el mundo busque una mayor flexibilidad en el uso de la energía. Al mismo tiempo, las tendencias presentan una oportunidad para que el sector de los centros de datos se adelante a los acontecimientos. Al convertirse en gestores de energía, en lugar de meros consumidores, los agentes del mercado pueden encontrar formas más eficientes y rentables de abastecerse. Las opciones renovables innovadoras presentan una vía muy atractiva en este sentido.

Una tendencia que se está observando es que los proveedores de centros de datos empiezan a recurrir al sector energético en busca de soluciones. Para ellos, es cada vez más probable que la optimización de la eficiencia no consista solo en estar cerca de la red, sino también del lugar donde se genera la energía, o incluso en generar o almacenar energía in situ.

Reflejo de estas transiciones fue el anuncio, a principios de marzo, de que Amazon Web Services (AWS) había adquirido el campus del centro de datos de Talen Energy en una central nuclear de Pensilvania (EE. UU.) por 650 millones de dólares y planeaba desarrollar un campus de 960 MW.

Además, el creciente compromiso con esta causa ha quedado demostrado con el lanzamiento, el pasado mes de septiembre, de la iniciativa paneuropea Net Zero Innovation Hub para centros de datos de la multinacional danesa Danfoss, junto con Google, Microsoft y Schneider Electric. Se ha introducido como reconocimiento de la necesidad de un rápido cambio social hacia una economía con cero emisiones de carbono, algo que las empresas no pueden resolver por sí solas.

Consciente de la importancia de este tipo de proyectos para hacer avanzar las cosas, Data4 se unió a la iniciativa a principios de este año. La empresa sabe que la industria necesitará una combinación de estrategias y tecnologías para alcanzar sus objetivos ecológicos, por lo que es necesario un planteamiento coordinado y multisectorial entre los distintos agentes para convertir el debate en acciones efectivas.

Viento y sol

Pero esta acción es solo una de las múltiples facetas de la innovación de Data4 en materia energética. Dada la evolución de la industria y de la sociedad en general, está explorando nuevas formas de vincularse con los agentes energéticos.

Esto ha culminado en el cierre de importantes acuerdos con Eurowatt y Photosol, líderes franceses en energías renovables. Estos dos contratos a largo plazo, denominados acuerdos de compraventa de energía (PPA, por sus siglas en inglés), son un buen ejemplo del compromiso reforzado que los operadores de centros de datos desean asumir con respecto a iniciativas energéticas de futuro.  

Estos acuerdos también reflejan nuestra convicción de que no habrá una única solución para garantizar fuentes de energía sostenibles a largo plazo, sino que se requerirá una combinación de estrategias como parte de una cartera energética más amplia y diversa. Esto se debe a que los contratos son con empresas de energía eólica y solar, y abarcan tres parques eólicos en Francia con Eurowatt y tres parques fotovoltaicos con Photosol. Los acuerdos se complementan entre sí, ya que cada uno proporciona un tipo de energía que suele estar disponible cuando la otra está ausente, lo que permite un suministro de energía más constante.

Además, distribuyen el riesgo al incluir fuentes de energía en distintas partes del país, y se aprovechan las diferentes condiciones climáticas de cada lugar. Por ejemplo, el contrato Photosol abarca parques fotovoltaicos tanto en la región de los Alpes Marítimos, en la costa sureste de Francia, como en la región de Loir-et-Cher, al sur de París.

El establecimiento de estos sólidos acuerdos podría sentar las bases para otras futuras y prometedoras colaboraciones entre ambas empresas, tanto en Francia como a escala internacional. Data4 también está estudiando la posibilidad de introducir modelos similares en mercados como Italia, España y Polonia. Sean cuales sean los resultados de estas iniciativas, en el futuro pueden servir como modelos a seguir a la hora de enfocar la cuestión de la energía para los centros de datos.

Explorando muchas opciones  

Así pues, los acuerdos innovadores están contribuyendo a allanar el avance del sector, junto con otras muchas iniciativas energéticas. A modo de ejemplo, Data4, que ha querido situarse a la vanguardia de la sostenibilidad en todas sus operaciones, está aprovechando estrategias y explorando opciones que van desde la construcción de centros de datos con hormigón bajo en carbono hasta la reutilización de calor con la creación del primer centro de datos biocircular cerca de París.

También se está produciendo una densificación de los racks en los centros de datos para atender la demanda de energía vinculada, en particular, a la inteligencia artificial.

Además, aunque el rápido crecimiento de la IA está creando una necesidad creciente de capacidad adicional y, por tanto, una mayor demanda de energía, la propia IA puede ayudar a contrarrestar algunos de estos problemas hasta cierto punto. Algunos de los métodos serían ayudar a optimizar el consumo de energía o permitir cambiar los parámetros en tiempo real. En la actualidad, el ritmo de crecimiento de la IA está superando el margen de optimización, pero el aumento en la eficiencia de los métodos posibilitado por la tecnología podría cambiar el panorama con el tiempo.

No hay soluciones mágicas

Sin embargo, el sector debe recordar que es improbable que exista una única solución mágica para abastecerse de energía o lograr la eficiencia energética. Por eso hay que tener en cuenta muchos métodos y utilizarlos en paralelo para ayudar a optimizar el uso de la energía en los centros de datos. Los muy diversos agentes implicados, como proveedores de centros de datos, hiperescaladores, empresas de contenidos y proveedores de energía, también deben implicarse para encontrar la manera de avanzar de una forma que beneficie a todos.

Sin duda, en el clima actual, opciones como los PPA verdes ayudan a matar dos pájaros de un tiro: proporcionan fuentes de energía renovables y cierta previsibilidad financiera. La ubicación óptima de los centros de datos para aprovechar al máximo los recursos energéticos locales y el refuerzo de los vínculos con la industria energética también cobrarán importancia de cara al futuro.

Si los proveedores de centros de datos toman medidas para abordar activamente estas futuras necesidades energéticas, pueden convertirse en auténticos conductos inteligentes para la gestión de la energía. Eso les ayudará a dar ejemplo no solo en su propio sector, sino en muchas otras industrias. Asimismo, sentará las bases de las próximas etapas de la transición del mercado hacia la energía sostenible.